Existen varios tipos de sociedades y la sociedad de acciones simplificadas (SAS) es una de las que suele recibir gran atención, ya que se considera una alternativa a la sociedad anónima, para poder contar con sus ventajas pero descartar sus complicaciones que se derivan de sus reglamentaciones.
Ahora bien, las sociedades comerciales simplificadas no son lo mismo que las sociedades anónimas, al respecto, las SAS son sociedades comerciales donde el capital se fracciona en varias acciones y las competencias de los socios están limitadas por sus respectivos aportes a la sociedad.
En cuanto a los antecedentes de las SAS, es necesario hacer referencia al año 1994 en Francia, fue cuando surgió la necesidad de diseñar o crear un instrumento legal para generar facilidades para la creación de empresas.
¿En qué consisten las sociedades de acciones simplificadas? /más información acá/
Una de las mejores formas de conocer o comprender las sociedades de acciones simplificadas, es a través de sus diversas características, esos rasgos básicos que conforman su esencia e incluso resaltan como puntos beneficiosos, se trata de:
● No es necesario crear juntas directivas.
● La duración de una sociedad de acciones simplificadas no está preestablecida, es indeterminada.
● La organización de un SAS se puede establecer con total independencia, según como prefieran sus socios.
● Las sociedades de acciones simplificadas incluyen voto múltiple.
● Todas las normas societarias pueden ser establecidas según prefieran los socios, logrando que atiendan a sus intereses y necesidades.
● Admite presentar varias acciones.
● Una SAS consiente el objeto social sea indistinto, con el objeto de llevar a cabo varias actividades lícitas.
● Si un tipo de sociedad como esta es liquidada, los socios responden según sea el monto de su aporte cuando se llevó a cabo la constitución de la empresa.
● El costo de crear sociedades de acciones simplificadas depende del capital registrado y los respectivos activos.
● En caso de representación legal, pueden realizarla varias personas, siendo quienes asumen la responsabilidad si las normativas no se cumplen.
¿Qué se debe hacer para crear una sociedad de acciones simplificadas?
Este proceso es simple y puede ser llevado a cabo por una persona física o una persona jurídica o incluso ambas, en cualquier caso es obligatorio crear un documento público o privado y la inscripción en el registro de comercio, aunque también suele ser admitido a través de los medios digitales. De igual forma, el documento debe tener varios elementos como:
● Los nombres y documentos de identidad de los socios o su identificación fiscal.
● Denominación de la empresa, siempre acompañada de la frase sociedad por acciones simplificada o las siglas S.A.S.
● Domicilio principal de la sociedad y sucursales.
● Capital social.
● Número y valor nominal de las acciones.
● Tiempo de duración.
● Formas de integración y de administración.
● Competencias o responsabilidades de los administradores.
Para finalizar, las sociedades de acciones simplificadas son una interesante opción a la hora de crear empresas, nada mejor que poder contar con requisitos y procedimientos simples, sin tener que enfrentar diversas dificultades.